He recibido con gran satisfacción vuestros comentarios. Pero estos, junto a las circunstancias personales que me rodean y la experiencia que estoy viviendo me da una opinión:
No descarto lo dicho en el artículo anterior, más bien, lo reafirmo. Pero hay que tener en cuenta algo: no es fácil. Esta afirmación en cierto modo es absurda, pero real. Entonces nos preguntamos ¿Por qué? La respuestas pueden ser variadas, pero voy a expresar lo que siento:
Una vez que se ha terminado el período lectivo, nuestra mente empieza a descansar pero el problema es cuando se vuelve “ociosa”. En este estado no queremos realizar ningún esfuerzo, a no ser que sea obligado. Además el propio calor del verano nos fatiga, y rendimos menos, acompañado de los amigos con que queremos salir y que en cierto modo ocupamos gran parte del tiempo en ellos 8cosa que no está mal).
Entonces nos encontramos con un estado de estancamiento: no hago lo que verdaderamente quiero hacer en época de clases, porque no tengo tiempo o/y estoy muy cansado, y no hago en verano lo que verdaderamente quiero hacer por las causas ya expuestas arriba.
No me queda más otra que proponer lo siguiente: es recomendable realizar actividades organizadas por colegios, grupos e instituciones, como la música, los bailes, los escouts, el teatro… Además comenzar con la lectura, cosa que muchos se les hace difícil realizar, la solución es leer una página un día, y al día siguiente (o la semana siguiente) leerse dos páginas al día. De estas dos formas, la mente no permanece tan ociosa y las ideas y ganas de realizar otras cosas empiezan a florecer.
Una amiga que ha comentado en el artículo anterior me ha dicho que las ganas de dibujar las tenía en época de clases, pero una vez en vacaciones, las ganas salían volando. Simplemente por la ociosidad de las vacaciones, no tiene ideas, pero tal vez si sigue lo que he recomendado arriba, su mente empieza a trabajar y las ideas vuelven a anidarse.
Tengo que confesar que ahora tengo la mente “ociosa” y que evidentemente estoy luchando contra ello, por eso, no he actualizado más este blog.
Así que, ¡ánimo!
Y les mando un abrazo.
No descarto lo dicho en el artículo anterior, más bien, lo reafirmo. Pero hay que tener en cuenta algo: no es fácil. Esta afirmación en cierto modo es absurda, pero real. Entonces nos preguntamos ¿Por qué? La respuestas pueden ser variadas, pero voy a expresar lo que siento:
Una vez que se ha terminado el período lectivo, nuestra mente empieza a descansar pero el problema es cuando se vuelve “ociosa”. En este estado no queremos realizar ningún esfuerzo, a no ser que sea obligado. Además el propio calor del verano nos fatiga, y rendimos menos, acompañado de los amigos con que queremos salir y que en cierto modo ocupamos gran parte del tiempo en ellos 8cosa que no está mal).
Entonces nos encontramos con un estado de estancamiento: no hago lo que verdaderamente quiero hacer en época de clases, porque no tengo tiempo o/y estoy muy cansado, y no hago en verano lo que verdaderamente quiero hacer por las causas ya expuestas arriba.
No me queda más otra que proponer lo siguiente: es recomendable realizar actividades organizadas por colegios, grupos e instituciones, como la música, los bailes, los escouts, el teatro… Además comenzar con la lectura, cosa que muchos se les hace difícil realizar, la solución es leer una página un día, y al día siguiente (o la semana siguiente) leerse dos páginas al día. De estas dos formas, la mente no permanece tan ociosa y las ideas y ganas de realizar otras cosas empiezan a florecer.
Una amiga que ha comentado en el artículo anterior me ha dicho que las ganas de dibujar las tenía en época de clases, pero una vez en vacaciones, las ganas salían volando. Simplemente por la ociosidad de las vacaciones, no tiene ideas, pero tal vez si sigue lo que he recomendado arriba, su mente empieza a trabajar y las ideas vuelven a anidarse.
Tengo que confesar que ahora tengo la mente “ociosa” y que evidentemente estoy luchando contra ello, por eso, no he actualizado más este blog.
Así que, ¡ánimo!
Y les mando un abrazo.
2 comentarios:
Gracias por volver!
Tienes toda la razón en lo que dices, la mente nunca descansa del todo pero sí se vuelve un tanto ociosa, y a veces hay que darle un pequeño arreón.
Una frase que me ha gustado desde siempre: "Todo es ponerse"
Espero que te pongas, y que nos pongamos todos un poquito más, saldremos ganando.
Un saludo!
Perdona por no estar de acuerdo, pero la forma de trabajar de mi mente es estando "ociosa". Sí, suena raro, pero adoro dejarla divagando. Acepto que a la hora de centrarme en algún proyecto no pueda ser el mejor trabajador, pero me deja una forma de vida alegre y desenfadada, a la cual le he cogido cariño. Me entretengo con moscas, me tumbo en la cama y muchas veces dejo las cosas para otro día, pero me hace olvidar lo que de verdad no son problemas y pensar en lo que considero más importante, al son de una buena instrumental...
Ya lo verás en el post que subí hara como 1h.
Nos vemos!
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