Importante:

Soy una persona que comete errores como todo el mundo. Si piensas que estoy equivocado y no estás de acuerdo...¡Coméntalo por favor!

viernes, 27 de marzo de 2009

Pregunta tonta: respuesta interesante.

Suponiendo que…recibiendo un millón de euros ¿Qué harías?



Tengo muy presente que esta pregunta ha sido muy formulada pero veamos tres respuestas “generales”

(seguramente hay más):



¿Cuál es la respuesta más común?



Gastártelo todo personalmente: comprar coches, otros objetos…., pagar todas las deudas y reservar una parte para ahorrar.



¿Qué es lo más solidario?



Dar todo - una gran parte- a una ONG.



¿Qué es lo más inteligente?



Invertir -una gran parte del dinero-: especialmente en una empresa.



Analicemos:



Si das casi todo a una ONG ¡Qué gran humano eres! Pero pan para hoy y hambre para mañana.



Si lo gastas todo en ti mismo, disfrutarás mucho y tendrás cosas que te duraran por algún tiempo. Pero el millón de euros saldrá volando por la ventana y al cabo de unos años, quedarás como si no hubieses recibido ningún millón. Además, es una actitud avariciosa y egoísta ya que se piensa sólo en sí mismo.



Si lo inviertes: optas por una mejor opción que la primera pero es una opción igual –o más- de egoísta y avariciosa que la anterior.



Entonces aquí, es cuando nos entra la desesperación, y nos gustaría buscar una respuesta.



Creo que lo más inteligente y humano sería lo siguiente:





Gastas una pequeña parte en las cosas que te apetezcan y saldas todas las deudas posibles. Otra pequeña parte la das a una ONG- intenta que sea una ONG DE CONFIANZA-, o para ayudar a una persona. El resto lo inviertes de forma muy inteligente y sin muchos riesgos.



Por ejemplo: inviertes en un restaurante. Pasado un tiempo, tú recibes más beneficios. Estos, los divides en dos partes: una parte (aunque sea un 10%) lo das a una ONG. Otra parte (pequeña) para los gastos personales y otra para invertir en otras empresas o “expandir” la ya creada.



Tiempo después, tu empresa ha crecido y/o ya has creado otras empresas. Esto quiere decir que los ingresos (beneficios reales) han aumentado drásticamente. Entonces sólo gastas para uso personal la misma cantidad que en años anteriores, una gran parte para ONG y otra para seguir invirtiendo.



¿Por qué gastar la misma cantidad para uso personal? “¡¿Acaso no me lo merezco?!” “¿No puedo tener más prestigio social?”



La respuesta es muy simple: para que no te conviertas en un avaricioso, egoísta, consumista y materialista como muchos famosos y empresarios que conocemos. Aquellas típicas personas que compran yates, casas…pero la final y al cabo son unos desgraciados.





Esta es mi respuesta, y pienso que, siguiendo estos pasos serás una persona que, aparte de no tener problemas económicos personales, también tendrás un futuro familiar asegurado. Además serás uno de los que impulsará la economía de tu país. Pero lo más importante: serás caritativo y ayudarás a mejorar la humanidad.





Mi respuesta al planteamiento inicial es sencilla y estoy seguro que muchos –o casi todos- darán o han dado mejores respuesta que la mía. Pero mi intención no es de convencer a nadie, es de que pienses y reflexiones seriamente. Es decir, que mi respuesta es una invitación a que tú saques la tuya propia.





Este texto es una introducción a otro que viene a continuación: “El imbécil hispanoamericano”





¡Saludos y un gran abrazo!

domingo, 15 de marzo de 2009

¡Yo sufro MUCHO más!

Muchas veces nos quejamos o “lloramos” por situaciones o condiciones que nos hacen sufrir. Esto, es una reacción obvia. Pero analicemos un poco: muchas de nuestras quejas son completamente “estúpidas” comparadas con otras. Y no hace falta ver a los niños demacrados de África Central ni a las familias con sus hogares destrozados por las armas (como en Gaza) Simplemente hay que observar detenidamente y analizar a los que tenemos muy de cerca como la propia familia, los amigos (íntimos y no tan íntimos), los compañeros, los conocidos…personas con quienes hablamos y vemos en carne propia, no por la televisión ni por ningún otro medio de comunicación de masas.

  • Veamos las situaciones en que muchos se pueden encontrar:

Muchos se quejan por la muerte de sus abuelos, otros por el divorcio de sus padres.

Muchos se quejan por no tener muchos amigos, otros por no tener ninguno.

Muchos se quejan por no tener el dinero suficiente para comprarse (por los momentos) un ordenador de última generación, otros ni pueden comparase uno usado.

Muchos se quejan por no salir muchas veces de su lugar natal, otros por estar muy lejos de su lugar natal y de su familia.

Muchos se quejan por unos padres que no los dejan salir hasta tarde, otros por no poder hablar con ellos (están muy ocupados)

Muchos se quejan por sentirse ignorados y poco conocidos por los demás, otros por sentirse humillados y burlados por los demás.

Muchos se quejan por ser malos en algún deporte, otros por no poder practicarlo.

Muchos se quejan porque sus padres no tienen un salario muy alto, otros porque sus padres no tienen trabajo.

Muchos se quejan por no tener novio o novia, otros porque sus novios o novias le han dejado.

Muchos se quejan por ver su meta muy lejos, otros por no tenerla

  • Puedes añadir otras cosas que son fruto de tu experiencia personal. Así, puedes realizar una extensa lista.

Muchas veces pensamos: “este si que es feliz, tiene esto, es esto, lo otro… “ pero incluso, esa persona tiene sufrimientos peores, que no vemos, y es infeliz.

Claro, también hay que tener en cuenta que hay quienes tienen menos sufrimientos, pero son pocos tolerantes a estos por más pequeños que sean. Además, llegan a convertirse en unos amargados, problemáticos, inestables (mentalmente) por estupideces, e incluso por cosas que son producto de su imaginación.

Lean una pequeña experiencia personal: En una clase había tres chicos. Dos de estos estaban riéndose de una situación que involucraba al tercero. Aunque las risas no eran dirigidas directamente al chico, ni se oía una ofensa dirigida hacia él, este se sintió ofendido, humillado y bofeteado (incluso, llego a tomar la decisión de no querer hablar con uno de ellos) Si esta persona fuese más racional y asertiva, ignoraría los comentarios o, incluso, se reiría con ellos. Además, su “delicadez” no le permite ver la realidad tal como es, y esto, le hace poco tolerante a un sufrimiento falso (las burlas), es decir, fruto de su imaginación (un pseudo-sufrimiento)

No nos inventemos “sufrimientos”, analicemos detenidamente la situación de nuestros cercanos y seamos conscientes que todo ser humano “sufre” desde una parálisis casi total, hasta simplemente un dolor de muela.

Seguiré hablando de este tema que es muy extenso.

Muchos abrazos.